O Cebreiro - Triacastela

En el alto de San Roque, a 1.270 metros, recibe al caminante la estatua de un peregrino y continuando la ruta se llega al lugar de Hospital da Condesa, que debe su nombre al hospital fundado en el s. IX por la Condesa de Gatón para atender a los peregrinos medievales. Es de destacar su Iglesia de San Xoan, y las vistas desde el Alto do Poio a más de 1.300 metros. 

La etapa sigue en descenso hacia Fonfría para entrar en el término municipal de Triascatela por el lugar denominado Campo de Furco. A un kilómetro del límite con Pedrafita pasaremos por Biduedo, desde donde empezamos un suave descenso de 7km hasta Triacastela.
Antes de llegar a esta localidad, durante la construcción de la catedral de Santiago, había una cantera donde muchos peregrinos cogían una piedra y la transportaban con ellos para contribuir a la edificación del templo.
En un pronunciado descenso, a la altura de Ramil, podemos ver los tres castros que posiblemente dieron nombre a Triacastela. Otros historiadores creen que el nombre puede hacer referencia a la existencia de tres castillos, representados en la torre de la iglesia. Además, en la propia parroquia de Ramil encontramos un hermoso castaño centenario, de más de 800 años, que se ha convertido en uno de los árboles más fotografiados del Camino.
La entrada en Triacastela pone fin a la etapa. Esta localidad está íntimamente ligada a las peregrinaciones. Su nombre ya aparecía como final de etapa en el Códice Calixtino y algunos autores aseguran que fue fundada por Alfonso IX, monarca que deseaba hacer de Triacastela una de las ciudades más florecientes de su reino.
A día de hoy aún se conservan algunas pegadas de construcciones relacionadas como el antiguo hospital de peregrinos o la antigua cárcel. No dudéis en daros un paseo por sus calles y visitar su iglesia románica, dedicada al Apóstol.