Los valores del Camino en 12 meses
Carmen cambió su mochila por una bolsa en la que ir recogiendo basura a lo largo del Camino de Santiago. Y así se convirtió durante las cinco jornadas que separan León de Ponferrada en ecoperegrina y protagonista de esta historia con la que desde El Camino con Correos queremos celebrar el Día del Medio Ambiente.
“Una de las ventajas de que el @elcaminoconcorreos te lleve la mochila es que puedes convertirte en #ecoperegrina” e ir recogiendo latas y botellas de plástico por el Camino”. Con este tweet comenzó para nosotros la historia de Carmen, una madrileña enamorada del Camino de Santiago al que vuelve cada año para vivir, según sus propias palabras, una de las mejores experiencias de su vida. León-Ponferrada fue su último trayecto. Y en él decidió convertirse en ecoperegrina e ir recogiendo los envases que se encontraba a su paso.
La iniciativa no es nueva para esta madrileña: cada vez que acude a Buenasbodas, su pueblo natal, se da un paseo al tiempo que recoge los deshechos que se encuentra. Esta vez, Carmen decidió trasladar esta costumbre al Camino de Santiago, aprovechando una circunstancia muy especial: hacerlo sin mochila. “He realizado el Camino de muchas formas pero en esta ocasión mi pareja y yo decidimos contratar el Paq Mochila de Correos y caminar más ligera”, nos cuenta. “Pero yo soy muy inquieta y siempre tengo que hacer cosas. Así que decidí cambiar la mochila por una bolsa plástica y contribuir a mantener el Camino más limpio”.
Carmen recogió una bolsa llena de envases y latas cada 5km de su Camino de Santiago
“Los peregrinos son muy limpios”
La experiencia le ha valido para comprobar que, en general, el Camino de Santiago está bastante limpio. La media de nuestra peregrina fue de una bolsa con envases y latas cada 5 kilómetros, siendo los peores tramos los que discurrían por carretera o próximos a ella. “Los peregrinos son muy limpios”, asegura. Sin embargo, Carmen se ha encontrado con un problema ambiental bastante desagradable: la proliferación de KIeenex usados por todos los parajes, incluso en aquellos más recónditos e inaccesibles. “Me parece lamentable. Es algo muy fácil de recoger y a lo que deberíamos ponerle freno”. De hecho nuestra ecoperegrina está pensado en iniciar una campaña de concienciación por Twitter para evitar esta plaga y evitar, así, la imagen desagradable que se llevó de ciertas etapas.
Ser ecoperegrina le ha encantado a la protagonista de nuestra historia, que no descarta repetirla. Sobre todo por la buena respuesta de la gente, que a su paso la animaba a extender la iniciativa. “La gente lo agradece. Y los peregrinos también”, asegura Carmen, a quien se le escapa una sonrisa recordando como unos caminantes extranjeros le gritaban “¡bravo, bravo!” a su paso.
“En el Camino de Santiago soy mejor persona. Saca lo mejor de mí”
A pesar de ser la primera vez como ecoperegrina, no lo es en el Camino de Santiago. En 2010 tuvo su primera toma de contacto. Un Camino de Santiago organizado entre O Cebreiro y Santiago y del que nos confiesa que no disfrutó. “Quería probar a hacer el Camino porque yo soy muy amante del senderismo. Pero la cosa no fue bien. Aún había mucha nieve y la primera parte del trayecto nos resultó incómoda. Además estaba llena de gente y no podías ir a tu aire. Así que el primer contacto con el Camino de Santiago no fue el mejor”, relata Carmen. Pero no se dio por vencida y en el 2014 decidió probar de nuevo. “Esta vez sí que ya viví el auténtico espíritu del Camino. Y desde aquella vuelvo a él cada año. En ocasiones, incluso varias veces”, confiesa.
En este tiempo Carmen se ha convertido en una peregrina veterana. Ha realizado el Camino de Santiago en solitario, acompañada, en época de gran afluencia y hasta en Navidad. También ha probado varios itinerarios: varios tramos del Francés, el Sanabrés, el Portugués y el del Norte. Y fruto de esta experiencia tiene claro que hay tramos que intenta evitar, como Sarria-Santiago por su gran afluencia, o que no repetiría en el del Norte: “Es muy bonito pero un poco triste. Le falta algo de espíritu peregrino”. Pese a todo, cada vez que le apetece y puede, Carmen tiene claro que volverá al Camino. Y la razón es de peso: “En el Camino de Santiago soy mejor persona. Saca lo mejor de mí”.
Con la historia de Carmen, desde el Camino con Correos queremos sumarnos al Día del Medio Ambiente que celebramos este martes. Y, por supuesto, resaltar uno de los valores más especiales del Camino de Santiago: el de la sostenibilidad. Si habéis participado en alguna iniciativa ambiental durante vuestra peregrinación como Un paso limpio o Life Stars, os animamos a que lo compartáis con nosotros a través de los comentarios o en alguna de nuestras redes: Facebook, Twitter e Instagram. Y, sobre todo, recordad que mantener limpio el Camino es cosa de todos y garantizar su sostenibilidad, también. ¡Buen Camino, peregrinos!
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